Al reunirme con matemáticos, físicos, filósofos y curiosos, discutiendo el postulado pobreza y felicidad de mi autoría, se llegó a la conclusión que la pobreza y la felicidad son inversamente proporcionales y no relativos como dice el "filósofo" Felipe Lorenzo del Río. Se debe tener en cuenta, que lo relativo son diferentes lecturas dadas por observadores en diferentes posiciones con respecto a un mismo experimento. Leer la relatividad de Albert Einstein y en el diccionario abierto, leer conjuntos lúdicos relativos. POSDATA Un hombre diez veces pobre y un décimo de feliz, es más pobre y menos feliz que un hombre tres veces pobre y un tercio de feliz.
Respetando el postulado algo guasón de Ricardo de Cuba yo creo que la pobreza y la felicidad son siempre relativas a la situación personal y social en la que cada uno de nosotros vivimos, teniendo en lo personal más importancia el componente subjetivo y en lo social más el componente objetivo. La pobreza sería la carencia de lo necesario para vivir con dignidad en lo material y en lo cultural; claro que algunos se sienten pobres e infelices teniendo todo el oro del mundo y por eso quieren tener más porque no saben compartir. Sobre la felicidad, recuerdo que en una clase de filosofía con mis alumnos, llegamos a esta definición: la progresiva supresión de ausencias no solo en la línea del tener sino también y sobre todo en la del ser. Es decir, somos más felices en la medida en que vamos adquiriendo cosas que nos hacen más fácil la vida y sobre todo en la medida en que vamos siendo mejores personas que conocemos más, respetamos y compartimos más con los demás.